Habilitantes no han tenido éxito en el campo económico

Hoy el presidente Nicolás Maduro sigue los pasos del expresidente Hugo Chávez, quien solicitó en cuatro ocasiones poderes especiales que le permitieron legislar sobre distintas áreas a lo largo de sus tres periodos constitucionales como presidente de la República, causando polémicas entre la disidencia del régimen en cada una de estas ocasiones. No es de sorprender entonces la gran controversia que gira en torno a la propuesta del actual primer Mandatario Nacional.

En 1999, Chávez solicitó al extinto Congreso una Ley Habilitante que lo facultó por seis meses para legislar en temas tributarios, financieros, económicos y administrativos. Producto de esta ley se reformó el sistema tributario del país, con el establecimiento de nuevos impuestos como lo fue el Impuesto al Débito Bancario (IDB) y la reforma del reglamento para otros impuestos ya existentes como el Impuesto Sobre La Renta (ISLR).

En el año 2000, la recién creada Asamblea Nacional aprobó una segunda Ley Habilitante en los siguientes ámbitos: financiero, económico y social, infraestructura, seguridad ciudadana, organización y funcionamiento del Estado, y ciencia y tecnología. Los resultados económicos y financieros más notables de esta legislación por parte del Ejecutivo residieron en la reforma a la Ley Especial de Asociaciones Cooperativas y la reforma a la Ley de General de Bancos y otras Instituciones Financieras.

Al comienzo de su periodo 2007-2013, la Asamblea Nacional concedió la solicitud del presidente Chávez de una nueva Ley Habilitante con una duración de 18 meses. Las áreas en las que el Presidente legisló fueron mucho más amplias que las anteriores. Producto de este periodo especial surgieron una nueva reforma a la Ley General de Bancos, la creación del Fondo de Estabilización Macroeconómica, entre otros.

Con motivo de la emergencia por lluvias en el año 2010, Chávez solicitó a la Asamblea Nacional una nueva Ley Habilitante. Aprobada por un lapso de 18 meses, la misma fue la más amplia en cuanto a las materias sobre las cuales podría legislar el Jefe de Estado, de ella derivó una reforma a la Ley de Instituciones del Sector Bancario, la reforma a la Ley de Alimentación para los Trabajadores y Trabajadoras, la reforma a la Ley Orgánica del Trabajo, entre otros.

Se prevé que dentro de las medidas que puedan ser aplicadas en el marco de una nueva Ley Habilitante, entre en vigor la reforma a la Ley de Ilícitos cambiarios, dando paso a la conformación del tercer mecanismo de administración de divisas, el cual ha sido anunciado en ocasiones anteriores por distintos representantes del gabinete económico.

Motivos ocultos

Para el economista Ángel García Banchs, la nación no amerita una Ley Habilitante. Desestima los argumentos del presidente Maduro, ya que a su parecer la lucha contra la corrupción se puede llevar a cabo con los instrumentos legislativos actuales, así como la revisión exhaustiva de las estructuras gubernamentales del Estado. Sobre la guerra económica, García Banchs comentó: “No tengo conocimientos de una guerra económica, ni sé lo que significa, lo cierto es que a ningún empresario le interesa no vender, a ningún empresario le conviene la inestabilidad de los precios”.

El economista expresó que la Ley Habilitante es una estrategia dictatorial y estima que los alcances de la misma en el campo económico serán tan poco productivos como sucedió en las ocasiones en las que se habilitó al ex presidente Chávez para legislar en esta materia.

Ángel Mujica

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