Gobierno revierte políticas cambiarias para exportadores

El gobierno del presidente Nicolás Maduro ha revertido progresivamente los estrictos controles cambiarios para los exportadores, para generar  el autoabastecimiento de divisas, explica José Antonio Velázquez, experto en gestión cambiaria y tributaria de Ernest & Young  (EY) Venezuela.

El convenio cambiario 34, publicado en Gaceta Oficial 40.985, tiene como novedad que les permite a los exportadores hacer descuentos por gastos operativos al 40 por ciento de las ventas, al que antes estaban obligados a vender completamente al Banco Central de Venezuela (BCV).

A esto se le suma que se les reconoce a los exportadores sus valores de inversiones en dólares, contrario a lo que pasaba antes que solo se dividía en relación de 60 por ciento de reinversión y 40 por ciento de obligación con el Estado.

Velázquez asevera que el convenio tiene la particularidad de precisarle a las empresas que soliciten su aplicación, que no podrán solicitar divisas al Estado para la compra de materias primas.

Es decir, que en el fondo lo que busca el convenio es bajar la presión a la incapacidad del Estado en proveer las divisas que necesitan las empresas productoras en el país.

Según Conindustria la deuda de la industria privada venezolana con los proveedores asciende a 12 mil millones de dólares, lo que ha cerrado las líneas de crédito para materias primas, y ha causado el cierre de 12.700 empresas desde hace 18 años.

Según la Asociación de Exportadores (AVEX), el gremio espera por la aprobación de que ese 40 por ciento, ahora con descuentos justificados, se reduzca a un 20 por ciento.

Los descuentos abarcan el reconocimiento de los costos adquiridos con divisas propias en materias primas, insumos, activos fijos, bienes y consumos.

“Es espíritu de esta reforma es darle la posibilidad al exportador de que en la medida que haga inversiones directas pueda descontar del 40 por ciento, que es obligatorio venderle al BCV”, afirma Ramón Goyo, presidente de AVEX.

Y es que los fuertes controles generaron burocracia y redujeron las inversiones.  

Burocracia y trámites

Para poder acceder al control cambiario 34, las empresas deben tener recursos propios en dólares y poder demostrar el origen de los mismos. Del 40 por ciento que deben vender los exportadores al BCV, las compañías repatrían las divisas a cuentas en dólares de la banca nacional.

Los exportadores están obligados a vender sus dólares a la tasa flotante de Divisas Complementarias (DICOM). Dejando atrás en los convenios anteriores a SICAD y Simadi, tasas que prometieron ser flotantes pero se estancaron en brechas de precios.

“Dentro de las restricciones que tenemos dentro del control de cambio, por lo menos representa una pequeña ventana para lograr una tasa de cambio más competitiva”, enfatiza Goyo.

Según el abogado de EY, este con este convenio viene una rectificación significativa, ya que si tiene los soportes bien sustentados, los descuentos podrían llegar a ser en algunas operaciones de hasta el 100 por ciento de las ventas.

“Es tremendamente importante porque representa un incentivo para los exportadores, por lo menos desde el punto de vista cambiario”, asegura Velázquez.

Sin embargo, la Asociación de Exportadores  tiene como propuesta que la relación sea de 20 por ciento de compromiso de ventas al BCV, de hecho, “la propuesta ya está aprobada por la mesa de importaciones, y solo queda que el Ejecutivo decida”, afirma Goyo.

Exportadores de Venezuela

Actualmente se estima que hay 600 empresas que están exportando, un número significativamente bajo comparado con años anteriores.

Nichos como el aluminio, donde Venezuela estaba posicionado en la producción de rines para vehículos (producto estrella) dejaron de existir.

Por ahora se mantiene con discrecionalidad la industria del granito, donde los principales compradores son Europa y Brasil. 

Aura Cumare

acumare@dinero.com.ve